The Cove

Esta, al igual que muchas entradas en diversos blogs que he visitado sobre el mismo tema, no es una entrada usual. En mi caso porque no soy una persona conocedora del género documental para saber si alguna pieza es buena o mala. Mi única referencia es que recientemente esta peli ganó Oscar y Sundance como mejor documental y ya.

Pero hay muchas cosas que decir.
Lo primero es que a continuación pongo el enlace (que gentilmente me pasó una amiga) donde se puede ver el documental completo (incluso puede descargarse libremente). Pero antes de verlo aconsejo que sus mentes estén preparadas para la cruda realidad, la ignominia y el desespero de la impotencia.

http://www.movstreaming.com/watch-movie-the-cove-streaming-megavideo-4733.html

Si ya la vieron se pueden dar cuenta que no es simplemente una peli de delfines o carne contaminada con mercurio es una desgarradora descripción del genocidio de delfines en Taiji, Japón.

* Genocidio según la Real Academia de la Lengua Española se define como el exterminio o eliminación sistemática de un grupo social por motivo de raza, de etnia, de religión, de política o de nacionalidad.

Richard O’Barry fue el entrenador de cinco de los delfines que se usaron durante la producción del programa de televisión Flipper a mediados de los 60’s hasta que uno de ellos se le murió en sus brazos a causa del estrés. Estos animales fuertemente sensibles al sonido viven momentos reales de agobio y tensión cuando son recluídos. A pesar de su renuncia al programa, O’Barry se dió cuenta que su daño ya estaba encausado y ha durado estos años siendo un estratega, militante y subversivo en su guerra por liberar a tantos delfines como sean necesarios para que estas muertes no sean en vano. En su caminar se encontró que Taiji en Japón es la principal proveedora de “flippers” para espectáculos marinos alrededor del mundo pero ir allí fue más que inspirador, fue desgarradoramente traumático.

Este documental dirigido por Louie Psihoyos cuenta la odisea de un grupo de amigos que apoyados con tecnología de punta proporcionada por gente de ILM y que quieren mostrar el horror que sucede allí cada septiembre donde cerca de veintitrés mil delfines mueren al año. El drama de encontrarse con las imágenes, con la cruda verdad.

Yo no soy motor de convocatoria, ni mis pensamientos son políticamente correctos como para motivarlos hacer algo “bueno”, sin embargo para los interesados hay muchas formas de apoyar a este grupo de entusiastas, hay instrucciones en el sitio oficial.