Cuando uno ve una peli como Die Welle, se pregunta uno porqué no traen más cine alemán a nuestro país, está muy bien estructurado, la fotografía es muy buena, los temas son inquietantes y como si fuera poco tiene buena asistencia. Tanto Die Welle como recientemente también Das Weisse Band tuvo una salas llenas y eso es bien interesante. Sobre todo porque no son pelis fáciles, son densas, los temas son complicados y pareciera que no son para nada comerciales pero por el contrario su posición crítica y su cuestionamiento al statu quo permiten un tipo de esparcimiento diferente, muy diferente, al que uno pudiera ver en otra industria cinematográfica.
Esta peli dirigida por Dennis Gansel en 2008 resume dos grandes miedos de los alemanes contempóraneos. El primero, si es posible una nueva dictadura dentro de la cultura alemana; el segundo si es posible permitir moralmente recaer en los errores del pasado. La tesis de esta peli afirma que sí y sí, y el desenlace es abrumador.
De nuevo súper recomendada como pieza fílmica (considero la fotografía ejemplar y la música un protagonista invaluable) pero también como pieza contestaria y de reflexión.