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Bond 25

kinopoisk.ru

Estaba seguro que no iba «abrir la boca» para emitir un sólo comentario alrededor de lo que pudiera ser muy divertido en una Bond 25 si Rami Malek es el anunciado villano.

Por la cabeza sólo se me pasó un personaje con algo de frenesí, angustia y errático, muy humano pero ojalá también pudiera ser todo eso con algo de deformidad física (que apenas fue elegantemente sugerida en Casino Royale con Mads Mikklesen y sus lágrimas de sangre o definitiva y prefectamente en Skyfall con Javier Bardem cuando se quita su prótesis facial); lo que quiero decir es que por mucho que estuve gritando de emoción cuando anunciaron que Sam Mendes repetía detrás de cámaras después de Skyfall, que el título de la pieza iba a ser SPECTRE y que Blofeld iba a ser Christoph Waltz, la decepción no hubiera podido ser más pareja a esa primera euforia.

SPECTRE no es que haya sido un desatino absoluto; me imagino que cuando se revisa en estos días Quantum of Solace no es tampoco tan, tannnnn mala, pero es que su precedente era Casino Royale, que fácilmente puede estar en el Top 3 de cualquier fanático de Bond. A SPECTRE le pasó lo mismo, con Skyfall que es una peli de vendimia pura, donde el mito se recoge en una sola pieza excepcional; uno agradecía que Craig hubiera repetido, la línea de drama se hubiera mantenido con Neal Purvis y Robert Wade, y que el maestro Sam Mendes reforzara ese encanto perdido en la infame de Marc Foster.

Sin embargo, no fue Mendes, no fue el equipo reiterante de Purvis, Wade y John Logan (recientemente añadido en Skyfall ), ni tampoco Waltz o Craig. En fútbol, uno puede perder y ganar (o empatar) pero se habla de cómo se logra ese resultado; para nadie es un secreto que soy delirante hincha del Liverpool, un equipo que juega el todo por el todo, le apuesta todo al rojo, en un cincuenta-cincuenta donde puede perder o ganar, no juega a defenderse y por lo tanto sus partidos son una montaña rusa de emociones; a uno no le importa si perdió 3-0 contra el Barcelona, lo que nos importa es que dominamos todo el partido, a la mitad del segundo tiempo íbamos perdiendo uno-cero y el equipo bufaba como un toro tratando de enterrar su estocada; no pudimos y nos hicieron el segundo; no renunciamos y nos sorprendió ese maldito tiro libre de 30 metros; y, sin embargo, seguimos combativos tanto que nos taparon la doble de Firmino y Salah que el vertical devolvió con ese doloroso sonido metálico. SPECTRE se relajó y dejó que la historia la avasallara; Blofeld estuvo bien y la historia estuvo bien pero hubo demasiada indulgencia que perdonar; para mi el pecado mayor fue la explosión determinante sobre Blofeld, esperé poder perdonar todo y ver al austriaco quemado, deforme, casi calvo y con una marca horrorosa en la mitad de la cara y nos salen con esto:

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En serio, el maquillaje en la sutil quemadura de Sean Bean siendo el 006 de Goldeneye lo supera grandemente.

Hoy vuelvo a gritar de emoción, euforia y frenesí.
Revisaba IMDb y me topé que el director de Bond 25 es Cary Joji Fukunaga, fuerza gráfica demoledora en True Detective, creador de The Alienist, Beasts of No Nation y Maniac, que además pertenecerá a un reestructurado equipo de escritura al lado de Purvis y Wade, y otra leyenda andante, Scott Z. Burns, la mente detrás Side Effects, Contagion, The Informant! (dirigidas por Steven Soderbergh) y de Ultimatum cerrando la fantástica trilogía Jason Bourne.

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Dice IMDb que el rumor es que regresan a los orígenes; que es muy posible que el arco histórico tenga relación con Dr. No. Por mi lado, quiero ver un partido abierto en pantalla, atacando todo el tiempo, dispuestos a ganar el encuentro hasta el último minuto y ojalá disfrutando un excelente desempeño de Malek con media cara deformada y un brazo cibernético.

Me encanta la referencia de Gert Fröbe en Goldfinger:

Bond: Do you expect me to talk?
Goldfinger: No, Mr. Bond, I expect you to die!

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Casino Royale

Casino Royale es un peli de James Bond de 2006. Una franquicia de Ian Fleming que ha pasado de protagonista en protagonista y de director a director. Esta vez el ejercicio es para Martin Campbell, un director con un no muy afortunado portafolio para mi gusto pero que con esta peli se reivindicó completamente conmigo.

La primera vez que la vi fue en cine y salí muy emocionado. Para mi la peli es espectacular desde los créditos de Johnnie Frankel trabajados para Rattling Stick, acompañados por Chris Cornell interpretando la canción especial para esta versión hasta Daniel Craig elegantemente vestido con un extravagante arma automática diciendo “Bond, James Bond”.

Pueden decir que Craig no es un verdadero Bond, que la peli no hace parte de la serie y que lo que se pierde es el espíritu del sofisticado espía inglés que enamora a sus mujeres con tan sólo el brillo de sus ojos. Yo soy fanático moderado de las pelis de Bond, puedo decir que de niño trajeron de nuevo, en algún ciclo de cine, Diamonds Are Forever protagonizado por Sean Connery y quedé embelezado por la historia. Un agente del MI6, que la mayoría del tiempo viste un smoking, está siempre muy bien peinado, sostiene un vodka martini y usa una serie de aparatejos y artilugios que lo ayudan a lo largo de la peli a atrapar a sus antagónicos.

Vi otras pelis de Connery, vi otras tantas de Roger Moore (que para mí siempre fue El Santo), nunca vi una peli de John Fiedler, Bob Simmons, David Nimen o George Lazenby, detesté las pelis de Timothy Dalton, volví a reencontrarme con el personaje con Pierce Brosnan quien aparentemente había nacido para este papel y, finalmente, Daniel Craig. Un actor que nos tenía acostumbrados a fuertes y poderosas actuaciones en el cine independiente, Road to Perdition de Sam Mendes en 2002, The Mother de Roger Michell en 2003, Enduring Love también de Roger Michell en 2004, Munich de Steven Spielberg, no tan independiente, en 2005, The Invasion de Oliver Hirschbiegel en 2007 y Flashbacks of a Fool de Baillie Walsh de 2008.

Fue exactamente eso lo que me atrajo de este nuevo capítulo de Bond, cómo lograrían aprovechar todo el potencial de este actor en una peli medianamente sobria y de corte aventurero.

Bueno la respuesta es impactante, la peli es el nacimiento de este personaje, un hombre seco, maduro, mayormente tosco, elegantemente vestido pero que prefiere un whisky a un martini esnobista. Frágil de carácter y permeable al amor. Un hombre que cuando pelea sangra, que cuando le duele un golpe llora, un hombre que es capaz de sufrir y, sin embargo, un hombre con un excelente sentido del humor. Varias veces sonreí con sus chistes, varias veces logré carcajearme con sus frases de cajón. Intenté pedir alguna vez en un bar de renombre aquí en Bogotá un Vesper Martini, un trago de tres porciones de Gordons, una porción de Kina Lillet (un vermouth blanco bastante exótico) y una rodaja de cáscara de limón; no lo pudieron armar porque no sabían que era el Kina Lillet, en ese entonces tampoco yo lo sabía pero ansío poder probarlo y poder saber a que sabe Eva Green en un trago quien interpretaba a Vesper Lynd la Chica Bond de este capítulo.

El amigo con el que fui esa vez a cine, me dijo que fue demasiado el tiempo que le dedicaron al romance del hombre, anoche me ví la peli en DVD y mientras fue el romance, bajé y me hice un té doble, pintado con leche y galletitas, al subir, ya había empezado la acción y si fue un poco más placentera, pero en ir y venir tan sólo me demoré tres minutos, tres minutos que le sobran a la peli no está mal.

Al lado de Craig hay un gran equipo actoral que se comportó a la altura, muy bien señor Campbell, excelente dirección. La bellísima Eva Green, el noble Giancarlo Giannini, la majestuosa Judi Dench, el carismático Jeffrey Wright y el fabuloso antagónico Mads Mikkelsen con sus lágrimas de sangre.

Es una peli entretenida de principio a fin, la secuencia en Praga al principio de los créditos es hermosa, luego la secuencia en Madagascar estrenando su nueva categoría como Agente Doble 0 es sencillamente increíble y todo Montenegro es James Bond al 100%.

Ojalá la franquicia hubiera seguido así de bien, pero Quantum of Solace dirigida por Marc Forster en 2008 es una pérdida de tiempo, no sé qué le habrá pasado a Forster un excelente director que nos ha provisto excelentes pelis. Lo gracioso es que volví con mi amigo a seguir la secuela y a él le encantó :-S

Nota personal. Los dejo con un afiche que me encontré recientemente de la versión de Peter Sellers

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