Auteur, Camp, Exploitation, Hollywood, Indie, Melodrama, Miguel Vaca, Movie, Paul Shrader, Romance, Serie B, Strong Sexual Content, Vacacion

The Canyons

The Canyons

Dos grandes leyendas del cine de Hollywood se unen en 2013; Paul Shrader escritor de Taxi Driver, Raging Bull, Cat People e incluso The Last Temptation of Christ; por el otro lado, Bret Easton Ellis autor de American Psycho, Glamorama y The Rules of Attraction. Ambos escritores formaron una especie de cooperativa llamada The Canyons, una cinta protagonizada por Lindsay Lohan y James Deen donde Shrader es director y Ellis es guionista.

No se puede asegurar pero pareciera que todos los que quisieron trabajar debían entrar como productores asociados del proyecto, el cual considero una gran estafa. Dos súper estrellas de la industria cinematográfica, se unen a Braxton Pope y hablan de un proyecto en el que van a participar; en la primera ronda de inversión meten el proyecto en un grupo de financión colectiva (Kickstarter) y recogen patrocinio suficiente para asegurar a Lohan y a Deen; atención inicialmente el proyecto se llamaba Bait que significa «cebo» o «carnada»; luego empiezan a asociar al equipo de producción y antes de tener algo listo el revuelo de la producción permite que American Apparel done el guardarropa de la producción; finalmente logran un corto-avance con un toque de estilo de los 50’s, la prensa se vuelve loca y un bando se vuelve súper optimista mientras el otro súper pesimista.

Al final, después del lanzamiento de la cinta no se logra recoger ni 60 mil dólares, se empiezan a echar culpas entre todos y The Canyons es un gran fiasco.

Ahora bien, la trama… Mejor no hablemos de la trama, ni del desempeño del reparto, ni del guión, ni de la dirección, ni de la fotografía. Todo es espantoso -pero no espantoso bien sino mal mal-; lo único rescatable es la dirección de arte que logra encontrar unas locaciones increíbles y hermosas. A los 7 minutos el planteamiento es interesante y Deen que es un actor porno acostumbrado a un par de líneas de diálogo pareciera que si sabe actuar; a los 13 minutos como que empieza una peli porno «soft»; a los 21 minutos Deen deja por fin entrever que si es un actor porno, que no sabe actuar, que es falso y poco creíble; en adelante, nada en absoluto.

La cinta entera es una peli de explotación, cero interesante y con dos o tres escenas de camas sin mayor interés ni en la trama ni en el argumento. The Canyons no es nada y no se entiende como Ellis o Shrader se las ingenian para sacar adelante este proyecto; a no ser como decía anteriormente que sea una estafa.

Nota personal. ¿Extorsionaron a Gus Van Sant? ¿Qué carajos hace en esta peli? ¿Por qué se prestó para actuar aquí?

Standard
Drama, Fernando Meirelles, Indie, Miguel Vaca, Movie, Vacacion

Blindness

Blindness

Fernando Meirelles es un excelente director que primero nos trajo Cidade de Deus en 2002, con una magńifica estética y una historia increíble. Antes había dirigido y producido varios proyectos para televisión y otros largometrajes pero lo vinimos a reconocer hasta su quinta peli. Después confirmó de qué está hecho y realizó una conmovedora Constant Gardener en 2005 y que le valió varias nominaciones y un Oscar para su actriz principal, Rachel Weisz.

Tres años después, y luego de hacer de nuevo televisión, nos deleita con Blindness una peli basada en el libro de José Saramago, Ensayo sobre la ceguera.

Debo confesar que hasta hace muy poco me leí algo de Saramago, ya unos habían desertado su novela que me pareció cautivante, llena de vértigo, morbo y una extraordinaria narración. Desarrollarla en cine era todo un reto.

Pocos, en serio, pocos proyectos resultan verdaderamente gratificantes cuando pasan del libro al celuloide. Se me vienen a la cabeza tan sólo cinco de los que he leído; Curtis Hanson con Wonder Boys de 2000 basado en la novela de Michael Chabon, David Fincher con Fight Club de 1999 basado en la novela de Chuck Palahniuk, Stephen Daldry con The Hours de 2002 basado en la novela Michael Cunninghan, Mary Harron con American Psyco basado en la novela de Bret Easton Ellis y Tommy Lee Wallace con It basado en la novela de Stephen King (que es una tenebrosa producción para televisión).

El gran problema con un libro es que uno como lector se imagina todo muy específicamente, los espacios son muy luminosos o muy oscuros y los personajes son muy bajitos o muy gorditos pero nunca son los que le ponen a uno enfrente de la pantalla que incluso hablan muy diferente de lo que uno alguna vez se imaginó.

Teniendo esto en la cabeza Saramago nunca le puso nombre propio a ninguno de sus personajes, eran simplemente seres humanos con profesiones o características especiales. Después de sufrir su decadencia, es lo único que les queda: Su humanidad. Y el reto entonces se extiende a Mark Ruffalo que hace del doctor, a Julianne Moore que hace de la esposa del doctor, Alice Braga que hace de la mujer de gafas oscuras, Danny Glover que hace del tuerto del radio o Gael García Bernal que hace del rey del pabellón 3; el reto es que todos ellos no son sólo seres humanos son artistas reconocidos que deben desprenderse de su fama y hacerse humildes, mundanos, instintivos, animales, desconocidos.

Creo que es un producto acertado, fue muy fiel a la obra en su planteamiento, en su nudo y en su desenlace. Si uno cierra los ojos se alcanza a imaginar las líneas originales de Saramago. Me encantó la calidad del reparto que encarnó una población cosmopolita donde desde el primer ciego un japonés de fuertes y arraigadas costumbres se vuelven gratas sorpresas. Hubo instantes en la novela que me encantaron por su morbosidad, me llevaron al límite de mis instintos y quería disfrutarlos gráficamente en la peli. La putrefacción de los corredores, las telas que dejaban entrever los acaecidos pechos de las mujeres e incluso su violación por parte de los integrantes del pabellón 3 fueron momentos verdaderamente geniales. Eso sumado a descripciones de mendicidad, en la ciudad, los cortos donde se muestran los accidentes, los perros devorando cadáveres y todo el concepto de inframundo en el que se volvió esa nación hacen de la peli una desgarradora parábola.

Sin embargo, las imágenes de la ceguera blanca, la música, los pequeños detalles e incluso las mujeres bañando sus senos al aire libre con agua lluvia son tan bonitas que uno al final como espectador vive constantemente contrastes que evaluan la moralidad del ser humano yendo y viniendo entre horrores y belleza.

Standard