Antes de ver esta peli recomiendo 100% ver con anterioridad todo el material colateral que se creó alrededor de ella como expectativa e incluso una incursión, si es posible incluso, a Alien. Son ilustraciones que resuelven ciertos rincones del universo de Prometheus que no se tocan en la peli misma.
Peter Weyland TED 2023 Talk
Happy Birthday David
Tampoco hay que preocuparse por el material revelador (spoilers) de algunas críticas o reseñas: Scott no da una respuesta directa a ninguna de nuestras cuestiones simplemente crea este nuevo universo independiente y anterior a toda la saga para unirlas todas maravillosamente como ninguna otra precuela lo ha hecho con sus respectivas franquicias.
En mi humilde opinión Prometheus está más encaminada en generar dudas y es tan buena haciéndolo que aunque existen vínculos claros entre la franquicia original (Aliens) y esta cinta, como The Weyland Corporation, los alienígenas parasitarios e incluso «los ingenieros» y su tecnología, es un gran error tratar de unir Alien y Prometheus. Mientras este último filme de Ridley Scott plantea la gran inquietud de biólogos, teólogos y hasta ufólogos sobre el origen de la vida en La Tierra, Alien es una apología a la supervivencia y la problemática socio-política del enclaustramiento.
Había pensado que el tema del creacionismo sugerido por Scott era una fatalidad dentro de la historia –cómo se le ocurre a este gran director echar para atrás años y años de conocimiento «darwiniano», somos el biólogo cuestionando la tesis de Shaw-Holloway al principio de la sesión informativa- pero a medida que avanza la historia, surgen las mismas dudas y no queda resuelto si es un dios, un aliénigena o la evolución natural de nuestro planeta lo que generó la chispa de vida terrestre. Es decir, quedamos en las mismas, lo cual hasta cierto punto es bueno.
Para finalizar el tema de la trama, Prometheus nos inquieta, desde los mismos corto-avances de la cinta, con quiénes son estos ingenieros, porqué nos acompañaron durante tanto tiempo, porqué nos odian tanto y qué es ese planeta del cuál recibimos sus coordenadas. Sin resolver esto, Scott claramente abre una brecha para una secuela o una serie de ellas y lo más interesante no es siquiera una segunda parte hacia los destinos de esta historia misma, por primera vez en la historia del cine -creo- podría afirmarse que la dirección indicada para una precuela es una precuela de la precuela y que siguieramos avanzando hacia atrás resolviendo The Weyland Corporation, los androides, las investigaciones de Shaw-Holloway, los sumerios, los babilonios, los egipcios y volver de nuevo a los ingenieros. ¿Cuál camino tomará finalmente la franquicia? ¿Scott seguiría al frente? No lo sabemos pero definitivamente es un proyecto increíble.
¿Es Shaw/Noomi Rapace, una figura femenina tan poderosa como para compararla con Ripley/Sigourney Weaver? Definitivamente. La actuación de la sueca es desgarradora, retadora, emotiva y sin duda heroica, grandes cualidades que Scott supo resolver a través del guión de Jon Spaihts y la megaestrella Damon Lindelof -figura del equipo de J.J. Abrams en proyectos como Lost y Star Trek.
Pero a nivel de reparto por encima de Logan Marshall-Green, Sean Harris, Idris Elba, Guy Pierce o las mismas Charlize Theron y Noomi Rapace, está de nuevo Michael Fassbender deslumbrándonos. Parece imposible que se pueda superar su desempeño como Bobby Sands en Hunger, Connor en Fish Tank, Brandon en Shame o camuflarse más que el Teniente Archie Hicox en Los Basterdos, Burke en Jonah Hex o Magneto en First Class. Pero ahí esta este germano-irlandés con una actuación impresionante de un androide, un poco amanerado, sicótico, con un lado tan ocuro como un nazi y aún con una fascinación fanática por Lawrence of Arabia. Una locura de personaje en la cual se basa toda la intriga de Prometheus y que nos recuerda a sus previos-posteriores Ian Holm y Lance Henriksen, grandes androides de la saga. No me extrañaría en absoluto una nominación a los Oscar después de su forzada ausencia este año.
Hubiera sido muy divertido haber visto esta peli en IMAX pero al parecer estamos muy de malas con la distribución de este formato en Colombia. Lo hice en 3D y fue maravilloso (recuerden el truco de comprar al centro muy adelante). La espléndida fotografía de Dariusz Wolski es majestuosa en planos generales o intrigantes y oscuros en recintos cerrados. Su acercamiento a la fotografía de Alien es muy cercana obviamente ayudado por un excelente trabajo del diseño de producción de Arthur Max que permite admirar a Prometheus como una verdadera y creíble historia cronológicamente anterior -una de las quejas más profunda que tengo sobre los primeros episodios de Star Wars-. Me hubiera gustado eso sí que Wolski no hubiera sido tan tímido con sus primeros planos, Scott en sus filmes tempranos, como Alien o Blade Runner, abusa deliciosamente de ellos y casi le dan su rúbrica tan particular a nivel de estética.
Prometheus es una gran peli. Discutirla con fanáticos ha sido tal vez lo más interesante de ella y sus vacíos pueden ser lo más valioso dentro de la franquicia.