Una historia basada en los personajes de Robert E. Howard parece un cuento releído muchas veces en las páginas de Spawn, Constantine entremezcladas con un disparador como el Incredible Hulk y un James Purefoy simulando un desteñido Van Helsing de Hugh Jackman.
Esta peli me atrajo sólamente por ser la última pieza que interpretó nuestro querido Pete Postlethwaite y por eso trataré de sólo referirme a eso. Aunque también encontramos a Jason Flemyng con un excelente maquillaje y a Max von Sydow, grandes actores, la historia no les llega a los talones. Además una mala coordinación de eventos al inicio hizo que la peli se hiciera demasiado extensa en el planteamiento y una descriptiva estéril que no le aportó mucho a la trama, por el contrario se vio desdibujada en el desenlace, cojeando y tratando de resolver todos los nudos del argumento de una forma bastante desacertada.
Michael J. Bassett no logra evocar la belleza de la novela gráfica y nos enseña que no porque una historia esté basada en un excelente comic su transcripción al cine va a ser de igual calidad aunque, hay que decirlo. de no ser por el comic qué triste hubiera sido.