Auteur, Den Danske Film, Drama, Exploitation, Folk, Gangster, Indie, Miguel Vaca, Movie, Nicolas Winding Refn, Serie B, Storytelling, Thriller, Vacacion, World

Pusher

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Pusher literalmente significa jíbaro, que no es un traficante de droga sino su más simple expendedor. El jíbaro es el que está más satanizado en la cadena del narcotráfico porque es él quien decide si le vende a niños, a drogadictos muy llevados e incluso es al que le toca fiar, cobrar, amedrentar y matar para poder colectar el dinero que van a arcas más altas. Pusher de Nicolas Winding Refn es sencillamente eso, una semana en la vida de un jíbaro danés que es llevado al límite de lo que normalmente puede soportar. No sabemos si así son todas sus semanas o así es esta en particular porque el realizador genialmente nos deja en un vacío anacrónico que nos permite abrir nuestras cuestiones mucho más allá de lo primeramente establecido.

El jíbaro es Kim Bodnia e interpreta a un hombre frío, organizado que se le sale todo de control y termina muy transfigurado, arrinconado, estresado, frustrado. Pareciera que el camino que le abre Refn es tosco e improvisado, gracias a la forma en que Pusher es filmado -combina 16mm con Super 16 que son formatos de baja resolución- pero poco a poco nos vamos dando cuenta que detrás del jíbaro hay un gran trabajo de desarrollo del personaje que termina por conmovernos y simpatizarnos. Al lado de Bodnia, vemos a un joven Mads Mikkelsen en un papel secundario, no digamos que sencillo pero su evolución no es evidente en pantalla. Sabemos que Mikkelsen trabaja posteriormente con Refn (Bleeder, Pusher II, Valhalla Rising) y se entiende porque en el poco tiempo que tiene de exposición logra mostrarnos un personaje grosero, grotesco, descuidado y miedoso. La última vez que lo vemos, está de espaldas sangrando y con puntos suspensivos en su historia.

Siendo esta la primera peli de Refn, parece esbozarnos sus intereses más primarios a la hora de hacer cine. Lo primero es que le gusta escribir sus historias y tener control sobre ellas -si no estoy mal ha escrito diez piezas y diez piezas ha dirigido-; lo segundo es que le gusta hablar de hombres ordinarios, estándares, sin negar que son sobresalientes pero donde su esfuerzo aún no ha madurado en fama, fortuna o clase social; y tercero, de alguna forma se vuelven héroes ante nuestros ojos. Estos hombres singulares se vuelven el centro de atención (Bronson), la fuerza del afecto (Drive) o la guía de sus pares (Valhalla Rising). Muchos de sus personajes se desmoronan pero en otros estamos presenciando la cúspide de su estoicismo.

Refn en ese detalle es genial.

Pusher realmente es una peli interesante y súper pertinente para nuestro público, con toda la controversia alrededor de las narco-producciones, que tanto nuestros canales de TV como nuestras productoras de cine están realizando. Gran parte de mi desacuerdo con la censura hacia estas producciones es que sus críticos quieren tapar el sol con las manos y negar realidades de violencia que están latentes en nuestra sociedad. Si se entienden las producciones audiovisuales, independiente si son televisivas o cinematográficas, como apreciaciones, pulsiones de rechazo o incluso verdades de nuestra historia, y que obviamente no pueden hacerse a la ligera, tenemos en nuestras manos no sólo la oportunidad sino la responsabilidad de contarle al mundo lo sucedido en nuestra historia, en nuestro entorno y con nuestras palabras. Sea en ficción, docudramas o documentales. Lo que pasa es que toda la gente alrededor de estas piezas tampoco ayuda. No son apologías al crimen, son simplemente fórmulas baratas que les ha significado buenas regalías. Mi mayor contrariedad es que se están banalizando los hechos tomándolos de una forma simplista y lo que logran al final es sólo levantar costra donde aún no han sanado las heridas.

Cerrando la idea, lo que más estúpido me parece es que los actores pidan perdón por participar en estos roles. Ni ellos, ni los directores e incluso ni los escritores deberían pedir disculpas. Si se sienten apenados, no tomen el papel. No llamen más la atención en un sentido lastimero que es el que más causa daño. Si sienten que la aproximación es frívola o superficial denúncienla pero no se hagan cómplices y después pidan perdón. Y si no tienen más ideas pues de seguro hay mucha gente por ahí con muchas ganas de una oportunidad para demostrar todo su talento. Me parece genial que la teleaudiencia se haya movilizado y haya decidido no apoyar más algunas producciones. Lo que me parece errado es que traten de censurar el tema y no la calidad como se aborda. Los que deberían estar disculpándose son los estudios, los canales y las productoras porque en ellos si que recae la culpa de cómo se hacen y cómo se cuentan los acontecimientos.

No más producciones superficiales que banalicen nuestro dolor. Pero si a las producciones que traten de contar historias humanas sobre nuestra violencia y que se apropien de los tropos que el cine nos ha heredado. No estamos lejos. Hay una voz y una corriente en nuestro cine independiente que lo está logrando. Si no la han descubierto o no son conscientes de ella, les recomiendo revisar La Sirga o El Vuelco del Cangrejo. Dos ejemplos claros de cómo aproximarse a la violencia, sin negarla, sin caricaturizarla y de todas formas siendo protagonista de nuestra cultura.

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El resumen del 2012

por Diego Taborda

por Diego Taborda

Ya son tres años trabajando en este blog. Hemos acumulado en ese periodo 860 entradas, más de 80 mil visitas y un agradable acumulado de 2.000 comentarios. Todas estas cifras son más que alentadoras para continuar viendo cine con ustedes, cada vez que pueda.

Muchos hablan del 2012 como el año con el pico de las mejores pelis de la década -tardía- que termina, no sólo por la buena calidad de las producciones sino además por la cantidad de piezas que fueron promovidas. Gracias a esto esta entrada puede llegar a ser bastante extensa y nos ha tomado más de tres semanas llegar a redactarla completamente pero rigiéndonos por una pequeña regla de sólo nombrar cinco títulos por categoría, hemos logrado resumirlo bastante bien. Lastimosamente, se nos van a escapar un par de producciones importantes que hubiéramos querido incluir pero que no lograron llegar a nuestras salas o pantallas. A continuación este el listado que hemos preparado para ustedes sobre lo que vimos en este año.

Siendo estrictos con la clasificación y resumen del año hasta este momento, no hubo ninguna cinta perfecta -con una clasificación de 10 sobre 10- y la única ilusión para que esto cambie sería de pronto esperar a que The Master de Paul Thomas Anderson se estrenara en nuestras pantallas -porque Thomas Anderson siempre nos ha guardado una bella sorpresa con cada una de sus piezas-. Pero The Master no es la única esperanzadora a este nivel, también están Amour de Michael Haneke, Killing Them Softly de Andrew Dominik, Mud de Jeff Nichols y The Paperboy de Lee Daniels; lo que nos dice efectivamente que aún falta mucho por revisar para finalizar este año.

En este pequeño balance ya empieza a aparecer un protagonista y gran ganador, Matthew McConaughey. Con cinco producciones, Magic Mike, Killer Joe, Mud, The Paperboy y Bernie -si la aceptamos como una pieza temprana del 2012-, McConaughey demuestra que fue poco ortodoxo en sus decisiones de trabajo y que por el contrario fue muy arriesgado. De ser la cara más bonita de Hollywood casi que pasó a ser el texano más peligroso. Su riesgo le permitió con grandes directores independientes que sin duda sacaron lo mejor de él. Aunque pasó desapercibido en los Oscar de este año y en los SAG’s, en los Spirit logró dos nominaciones como actor principal y actor de reparto. Como una alineación especial de los planetas, no creo que Soderbergh, Nichols, Daniels o Friedkin vuelvan a dirigirlo el mismo año, en cuatro diferentes producciones. Sería este el año más especial dentro de toda su carrera y ojalá alcance los premios que le son tan merecidos en este periodo.

Si hablamos de las mejores pelis del 2012 para mi existe sólo una y es Looper de Rian Johnson. Looper no sólo marcó expectativa sino que casi fue impecable en el uso de los viajes a través del tiempo, en donde tan fácilmente se pueden generar incongruencias. No es una cinta perfecta, como lo decíamos antes, en este año no hubo tal, pero logró manejar audazmente la historia, los vacíos y el ritmo en la trama hasta desencadenar un final espectacular. Looper además de ser una cinta de ciencia ficción permite que una serie de subgéneros se entretejan y sea aún más fascinante su experiencia. Realmente sobresaliente el trabajo de maquillaje que sutilmente pudo vendernos el truco de que Joseph Gordon-Levitt era el joven pasado de Bruce Willis y la partitura original de Nathan Johnson. Otras que no desentonaron fueron Seven Psychopaths de Martin McDonagh, Skyfall de Sam Mendes, The Avengers de Joss Whedon, Madagascar 3: Europe’s Most Wanted de Eric Darnell, Tom McGrath y Conrad Vernon. Todas a niveles muy diferentes, lograron cumplir sus promesas frente a los espectadores pero debemos hacer una excepción y nombrar, además, Moonrise Kingdom de Wes Anderson. Anderson con su estilo súper definido y su perfecta artesanía nos devuelve un resumen de su carrera en una historia de amor enmarcada en los bellos parajes de Rhode Island.

Aparecen apenas dos “rompe-taquillas” de todo el paquete de megaestrenos, Skyfall y The Avengers, que a su manera lograron sobresalir de la competencia y lograr millonarios retornos sin afectar sus agendas internas; por un lado, Skyfall fue la mejor forma de celebrar los 50 años de la franquicia, se erige como la mejor peli de James Bond de todos los tiempos (supera claramente a Casino Royale) y reconfirma a Daniel Craig como el mejor Bond; por el otro, The Avengers siendo una peli de súper-héroes de comics y un “rompe-taquillas” de verano fue la única que prometió, respondió, no defraudó y siendo la primera en revelar su golpe dejó muy mal parqueadas al resto con un estándar muy alto para superar.

Una gran ovación se merece el cine colombiano este año pues tuvimos para escoger muy buenas cintas. La Sirga de William Vega, Sofía y el Terco de Andrés Burgos, Chocó de Jhonny Hendrix Hinestroza, y si hacemos un esfuerzo, Apaporis de Antonio Dorado y El cartel de los sapos de Carlos Moreno son las destacadas de este periodo. Sobre todo las tres primeras, marcan un hito en el estilo de hacer cine en Colombia, definiendo una narrativa, una selección de reparto y una temática de expresión muy propias de un fenómeno que aún nos queda muy difícil definir como movimiento y -aunque nos faltó ver La Playa D.C., Apatía y El Resquicio– seguramente no van a ser las últimas de este movimiento.

Pero como en todo, siempre existen desafortunadas equivocaciones, este año no fue la excepción. Sin ser malas, las decepciones del 2012 fueron Argo de Ben Affleck porque comparada con su previa The Town Affleck se rindió frente a una chovinista y a la vez muy bien elaborada artesanía, Prometheus de Ridley Scott porque Lindelof sigue pensando que la fórmula de Lost es ilimitada y aplicable a todo y en Prometheus no sólo hay una gran cantidad de incongruencias que rompen la trama y su tensión sino que además posteriormente descubrimos que el guión original tenía mejor relevancia pero fue masacrado por la petulancia de él, The Bourne Legacy de Tony Gilroy porque descubrimos que fue creada para continuar la franquicia sin mayor sentido que eso, The Hobbit: An Unexpected Journey de Peter Jackson porque sencillamente es una gran salida en falso y The Dark Knight Rises de Christopher Nolan porque aunque es consecuente con toda la trilogía, Nolan fue víctima de su propio invento y todo lo que había construido sobrecayó sobre él duramente. The Dark Knight Rises es tal vez la cinta con la tengo más problemas, de alguna forma, borró con el codo lo que había definido perfectamente con sus dos salidas anteriores, además que Nolan infantilmente fue demasiado pertinaz, reticente y receloso con la imagen del Joker lo que provocó vacíos aún más profundos en la trama. Su universo más humanizado, más real y consecuente terminó dilucidando precisamente desdén y apatía hacia la franquicia para proveer un final que sólo es adecuado en una alucinación dolosa de Alfred.

Finalmente, lo peor de lo peor, Abraham Lincoln: Vampire Hunter de Timur Bekmambetov, Savages de Oliver Stone, The Hunger Games de Gary Ross, Hope Springs de David Frankel y To Rome with Love de Woody Allen.

Próspero 2013.
Abrazos para todos.

Magic Mike
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Killer Joe
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Bernie
Bernie

Looper
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Seven Psychopaths
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Skyfall
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The Avengers
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Moonrise Kingdom

Artist: Ibraheem Youssef

Artist: Ibraheem Youssef

Madagascar 3: Europe’s Most Wanted
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La Sirga
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Sofía y el Terco
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Chocó
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Apaporis
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El cartel de los sapos
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Argo
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Prometheus
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The Bourne Legacy
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The Dark Knight Rises
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The Hobbit: An Unexpected Journey
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Abraham Lincoln: Vampire Hunter
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Savages
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The Hunger Games
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Hope Springs
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To Rome with Love
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The Master

Amour

Killing Them Softly

Mud

The Paperboy

The WordPress.com stats helper monkeys prepared a 2012 annual report for this blog.

4,329 films were submitted to the 2012 Cannes Film Festival. This blog had 22,000 views in 2012. If each view were a film, this blog would power 5 Film Festivals

Haga clic aquí si quiere ver el reporte completo

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La Sirga

William Vega, escritor y director, nos trae gracias a la producción Oscar Ruíz Navia (El Vuelco del Cangrejo) una pieza más del gran combo de cintas que se alimentan de nuevas historias, de nuevos mensajes y de nuevas locaciones colombianas. La Sirga es un proyecto titánico que se adentra en una historia sencilla de desplazamiento y violencia tácita, en los alrededores de La Laguna de la Cocha, departamento de Nariño (Colombia). En esta época donde lo digital se está fagocitando al celuloide, donde la producción con cámaras RED es mucho más económica que una de 35mm y donde el cine comercial es la salida segura para continuar en el negocio, aparece esta pieza que va en contra de la corriente, una metáfora directa del zuncho de esterilla que flota en la laguna en contra del viento.

Alicia, interpretada por Joghis Arias, es una niña que huye de su pueblo porque la violencia la alcanzó y quemó su casa. No tiene familiares cercanos y busca el último resguardo de consuelo y amparo en su tío Oscar (Julio César Roble) que vive al lado de la laguna y se erige como su único familiar vivo. Este la hospeda y la cuida -¡y vaya qué si la cuida!-. Su vivienda es un hostal llamado La Sirga pero está en muy mal estado, los tablones están podridos, las latas que cubren el techo están roídas por el óxido o despegadas por el descuido, el caso es que en noches de lluvia, adentro de La Sirga también llueve. Alicia no pudo haber llegado en mejor momento, Freddy (Heraldo Romero) primo de Alicia dejó al viejo hace un tiempo incierto y aún lo espera mientras el hostal se cae a pedazos, Alicia entonces se pone en la labor de mejorar la estancia para la llegada de “los turistas” reparando el tablado, el techo, las puertas y mientras tanto le ayuda a Flora (Floralba Achicanoy) en los desayunos y almuerzos.

La violencia vuelve a aparecer en la trama, justo con el regreso de Freddy. Se enrarece el ambiente, se siente la presencia de la guerrilla, de los paramilitares, de los tiras y sus sapos pero sobre todo del miedo y la incertidumbre.

La Sirga es una oda a ese estado momentáneo de la existencia en el que uno se siente en el limbo, desubicado, sin dirección o destino fijo. La sirga es un elemento, generalmente, una cuerda que ayuda a mover las embarcaciones hasta la orilla o también se le conoce a las zonas de paso entre puntos inundados. En la historia es una clara alusión al desplazamiento de Alicia, un personaje que esta de paso. Que no está aferrada nada y tampoco tiene una fecha establecida para su estancia. Joghis Arias aparece en pantalla sorteando el laberinto del páramo y de la niebla, se desploma del hambre y del cansancio y cuando nos cuenta su historia, despliega una mirada de cachorro herido con sendas bolsas de lágrimas ahogadas en sus ojos. Conmueve. Conmueve inmediatamente y su razón es que Joghis comparte la historia de Alicia, común en muchas niñas de cada ciudad, de cada pueblo y de cada municipio colombiano. Nacida en Caquetá la violencia le quitó a su abuelo, a su padre y huyó. Se refugió en una carrera de la Universidad del Valle y la actuación le llegó como un afortunado accidente. En general, la dirección de reparto es excelente como ninguna otra que hayamos visto últimamente. Los duros rasgos de Julio César Roble, aceitados con esencia de alacrán, son perfectos para el huraño tío; dos planos y un gesto apretando un poco los ojos y Heraldo Romero nos transmite desazón en esa ambigüedad de su personaje; Floralba Achicanoy, David Guacas y el resto del reparto son lugareños y hablan con ese endulzado acento pastuso inconfundible.

Hecha con una exquisita e impecable fotografía de Sofía Oggioni Hatty, esta cinta es una delicia para ver. A Oggioni Hatty la conocemos por su trabajo en El Vuelco del Cangrejo que también es un ejemplo de cinematografía acompañada de sonido ambiente. Esta vez sus planos viciados se combinan con la endiablada melodía del folclor pastuso. Unas destempladas tonadas acompañadas de violín, guitarra y tiple con unas voces toscas y graciosas que hacen de los planos melodiosos, pegadizos momentos -aún sigo tarareando el violincito del corto que apenas aparece en pantalla nos roba una divertida mueca y nos impulsa a palmear para seguirles el ritmo-.

Es un momento realmente anecdótico el que estamos viviendo y que debemos aprovechar al máximo. Seis pelis colombianas se exhiben en cartelera, Sanandresito, La Lectora, Carrusel, Chocó, Sofía y el Terco y La Sirga. Digamos que las tres primeras piezas no son de nuestro mayor agrado pero llevan gente a las salas y las acostumbran a esta gran experiencia (muchos hace rato no iban y no se acuerdan de las dinámicas de respeto en las salas pero bueno eso es harina de otro costal). La crítica empieza a hablar de una nueva corriente llamada Nuevo Cine Colombiano, me parece más sensato hablar de la excipiente nueva industria del cine colombiano. Una industria consciente de que debe crecer comercialmente para poder patrocinar sus proyectos más creativos y que de vez en cuando nos va a traer una joya como esta a las pantallas.

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