En una trivia sencilla buscando secuestros, presidentes de los Estados Unidos y thrillers políticos sobresalen sólo tres cintas; Olympus Has Fallen, White House Down y Air Force One; me puse a revisar el tema sólo por curiosidad en vista que entre el dilema del qué fue primero, el huevo o la gallina, iba a dejar pasar las primeras dos. Es terrible cuando los estudios en esa carrera contra la taquilla se inventan un proyecto igual a su competencia y lo sacan lo más pronto posible para combatirlo con el de la idea original. Los ejemplos abundan Dante’s Peak tratando de vencer a Volcano, Antz a A Bug’s Life, Shark Tale a Finding Nemo, Deep Impact a Armageddon y Olympus Has Fallen a White House Down son sólo un par de ellos.
A veces logran salir muy cerca a la fecha de lanzamiento de su competidora, a veces simplemente logran salir con mucha anticipación pero siempre hay una regla que perdura: el afán sólo trae errores. No siempre salir primero ofrece la distinción y la calidad, repetimos el que hace la idea original tiene más claro el camino y de pronto se demora un poco más pero el resultado es siempre mejor que el de su competencia.
Me atreví a ver esta White House Down por varias razones pero la principal es que le guardo cierto respeto a Roland Emmerich; he visto desde Universal Soldier hasta 2012; unas han sido un delirio de entretenimiento como otras han sido lo más desafortunado -incluso- del año; de toda esa lista me gustó la ya nombrada Universal Soldier, Stargate, Godzilla y The Patriot, el resto simplemente o me aburrieron o no desarrollaron una idea interesante.
Hoy domingo les recomiendo ver White House Down. Está al alcance del PPV, de Amazon Prime o de Netflix.
Emmerich se reinventa en esta cinta y vuelve al entretenimiento sencillo, con escenas de acción impresionantes, otra vez la destrucción de la Casa Blanca -el teutón debe tener una fijación con esto- y una pareja interesante con Channing Tatum y Jamie Foxx –este último como el presidente de los Estados Unidos–.
¿En qué se diferencia de Olympus Has Fallen?
Emmerich mantiene la situación simple alrededor de sus dos personajes principales, el presidente y su agente protector; se van conociendo y tanto ellos como nosotros desarrollamos empatía. Por su lado, Antoine Fuqua –director de Olympus Has Fallen– hace su tesis más compleja y a la vez más trillada; su héroe mantiene una relación cercana con el presidente, con la primera dama pero sobre todo con su hijo; cada escena suma más melodrama a la trama, su héroe está lleno de corazonadas y una gran infusión de suerte sumado a actos divinos que logran que su historia llegue a buen término en un acto de estupidez solemne.
Pueda ser que White House Down abuse un poco de los giros de la trama pero los personajes son fieles a sus emociones y se desarrollan bien dentro de la tensión y estrés del ataque. En la batalla final, la de las taquillas, Emmerich/Sony lograron 205 millones mientras Fuqua/FilmDistrict bastante cerca se llevaron la no despreciable suma de 160 millones. La dupla de Tatum y Foxx es tan buena que incluso es comparada con Bruce Willis y Samuel L. Jackson y no es tan descabellado, hasta en el afiche Tatum aparece con el clásico esqueleto blanco con toda la suciedad de su odisea.