Epochal, Exploitation, Hollywood, Mike Flanagan, Serie B, Terror

Doctor Sleep

No se si entré predispuesto a ver esta peli pero hacer una secuela de un clásico tan importante como de The Shining después de tantos años, me parecía un exabrupto. Podemos entender que Steven Spielberg haya dicho que, el recién fallecido, Kubrick le había comentado de un proyecto que la tecnología no le permitía desarrollar en su momento; era una trama de ciencia ficción y siempre discutimos que aunque bien hecha, le faltaba el picante del maestro para editar y terminar la historia; al final siempre pareció una pieza de Spielberg. Una trampa de taquilla bien ejecutada.

Doctor Sleep es una buena idea mal ejecutada. Reconozco que hay cosas interesantes al rememorar los corredores del Overlook Hotel pero todo el tema de los personajes con otros actores quita algo de mística; hubiera sido bonito toda la recreación con perfiles escondidos o sugeridos, con personajes insinuados y no una sensación barata de que no había el presupuesto para trabajar con los actores originales. De la misma idea, pasar de una delicada pieza de suspenso a una de terror y horror somete las herramientas, a clichés y hacia otra dirección; por no decir más, da mucha pena ajena con Ewan McGregor en los pedazos que su única salida fue la sobreactuación para solventar un duelo futil entre el bien y el mal, aterriza The Shining de una forma simplista y maniqueista que no tenía originalmente. Y finalmente, masticar toda la obra de Stephen King para explicar los detalles de la peli original creo que fue un disparo en el pie.

Rarísimo que le haya ido tan bien en crítica pero parece que no soy el único que piensa diferente; el descalabro en la taquilla es un recordatorio que no todos los reenlatados son buenos, que hay cosas que es mejor dejarlas en la estantería para recordarlas con el placer de la maestría con la que fueron ejecutadas. Sobre todo si son hechas por ese gran genio que fue Stanley Kubrick.

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Carlos Sorín, Folk, Indie, Latin, Miguel Vaca, Movie, Suspense, Thriller, Vacacion, World

El gato desaparece

A Carlos Sorín lo conocemos por su gran largometraje Historias Mínimas de 2002. Sus personajes reales, sus historias conmovedoras y su gran sentido de la narración terminaron por robarnos un poquito de corazón con cada historia y con cada personaje. Desde entonces estuvimos muy pendientes de sus pelis pero ninguna tuvo el suficiente empuje como para hacerse a una plaza en la cartelera local. Nos perdimos de Bombón: El Perro, El camino de San Diego, La ventana y sólo hasta ahora gracias a Cinemax podemos acceder a El gato desaparece, su penúltima producción.

Esta cinta escrita y dirigida por Sorín protagonizada por Beatriz Spelzini y Luis Luque es un poco diferente a lo que le conocemos al director. Sigue siendo una historia con personajes reales, muy argentinos todos, con una narración más que impecable y con un tema que no deja de ser complicado si no se maneja muy muy bien. El gato desaparece es un thriller de suspenso sobre un profesor de universidad que viene trabajando profundamente en un proyecto durante muchos años; un ataque de paranoia se vuelve sicosis cuando percibe que uno de sus colegas lo está espiando y quiere robarle su gran investigación. La emprende a golpes con el colega y termina recluido en un sanatorio. La gran trama de la cinta se resuelve cuando el profesor es dado de alta y debe regresar a casa. Su mujer percibe un aura misteriosa y empieza ella misma a actuar paranoicamente frente a muchas situaciones que pueden ser no tan normales.

El gato desaparece perspicazmente al ambiente que reina en la casa y sólo cuando un evento desata la claridad y cordura del profesor y su mujer el gato vuelve a aparecer.

El gato desaparece no es la mejor pieza de Carlos Sorín. A nivel de factura es elegante e intachable pero las referencias a The Shining de Kubrick son obvias y un poco forzadas dentro de la trama, no tienen mayor sentido y lo peor hace que el resto de la cinta no se sienta tan consistente. El planteamiento de la peli por el contrario, leyendo el caso en un juzgado es sencillamente genial. Si se animan a verla la están rotando por estos días.

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